Cómo decidir qué negocio emprender

Cuando has decidido que vas a emprender te puedes encontrar en dos escenarios: es tu primer emprendimiento o estás en otro y pensando en uno nuevo.

Lo que os voy a plantear es más común para los nuevos emprendedores, pero también se aplica al segundo grupo. Estos tienen las cosas más claras (o deberían) por pura experiencia, pero he visto muchos casos en los que pareciese que es su primer emprendimiento. Todo depende del momento de madurez del emprendedor.

¿Cuáles son las motivaciones de los emprendedores para poner en marcha un proyecto?

Antes de entrar en el cómo elegir tu emprendimiento, es importante que analices tus motivaciones, pues marcan la forma de tomar esa decisión.

Por resumirlo mucho tenemos dos escenarios:

  • Autoempleo: ya sea porque no estás sin trabajo o porque quieres dar un nuevo enfoque a tu vida profesional, te planteas el emprendimiento como salida.
  • Emprendedor nato: tienes una idea en mente, algo que aportar al mercado y tienes la ilusión de darle forma y lanzarlo.

El problema del primer caso, es que tus motivaciones son más económicas y/o emocionales, y por tanto, el objetivo de tu proyecto emprendedor es ganar dinero. Totalmente lícito, pero es posible que esto te haga seleccionar un modelo de negocio limitado y desconectado del mercado (tu interés no es el mercado, sino ganarte la vida).

En el segundo caso tu objetivo es poner en marcha algo que crees que el mercado necesita y además forma parte de lo que te apasiona. Por supuesto que quieres ganar dinero, pero es una consecuencia no el objetivo principal.

Como se suele decir «esto no es cómo empieza, sino como acaba». Puedes empezar de una forma y acabar de la otra, y viceversa. ¡A mí me ha pasado!

¿Cómo deciden los emprendedores el modelo de negocio de su nuevo proyecto?

Dicho lo anterior, ¿qué nos motiva para elegir un modelo de negocio u otro para nuestro emprendimiento?

  • Actividad relacionada con su profesión o con la actividad de su empresa: buscas una opción continuista. ¿Cómo puedo hacer mejor, y de forma independiente, lo que hago actualmente?
  • Se suman a un proyecto: alguien de tu entorno te propone participar en su emprendimiento porque piensa que tu perfil aporta valor al proyecto.
  • «Idea feliz»: en las fases de mayor inmadurez, a veces los proyectos se piensan casi al azar. Se plantean ideas que puedan tener sentido, y eligen la que más les convence.
  • Oportunidad de mercado: detectamos una oportunidad y damos forma a un modelo de negocio que la satisfaga.
  • Relacionada con tu propósito: pensamos en un proyecto que esté alineado con nuestro propósito personal. Esta opción puede estar combinada con las anteriores o arrancar desde el propio propósito.

El propósito como referencia para decidir el modelo de negocio de tu emprendimiento

Como acabo de comentar, no hay un único camino para llegar a tu proyecto de emprendimiento ideal, pero si una forma mejor que el resto.

¿Qué es lo que buscamos al emprender?, que nuestra empresa tenga éxito, ¿no? Esto depende de muchos, muchos factores, pero de estos ¿en cuáles puedes influir tu?, ¿a mayor afinidad del proyecto con aquello que más te motiva y mejor sabes hacer, mayores serán las posibilidades de éxito, no? A estas y otras preguntas puedes encontrar respuesta en el capítulo 5 de “Marketing para emprendedores”, donde empiezo a introducir el concepto del propósito dentro del libro.

Pues esto es lo que consigue el propósito, situarte en una actividad donde tienes las mayores probabilidades de éxito

¿Cómo se define el propósito personal o el propósito de marca?

Como es un tema que he tratado ampliamente en el blog, te hago una breve introducción al tema y te dejo los enlaces para que puedas profundizar.

Para introducir el tema en mis mentorías de marketing, suelo usar el concepto del IKIGAI por su simplicidad. Su verbalización tiene dos partes: LO QUE TU APORTAS AL MERCADO (puntos 1 y 2) + LO QUE EL MERCADO NECESITA (puntos 3 y 4).

  1. En lo que eres BUENO: ¿qué cosas se te dan especialmente bien?, ¿qué te gusta hacer?
  2. Lo que AMAS hacer: que no siempre coincide con lo que eres bueno. ¿en qué momentos sientes que disfrutas al máximo haciendo algo?
  3. Lo que el mundo NECESITA: puedes empezar por poner cosas genéricas, pero te recomiendo empezar por cosas que puedan estar directa o indirectamente relacionadas con las cosas en las que eres bueno o te gusta hacer. ¿Qué problemas deben resolverse? ¿qué necesidades necesitan ser satisfechas?
  4. Por lo que te pueden PAGAR: de las cosas que sabes hacer, ¿por cuáles te podrían pagar?

Qué es el Ikigai

Si quieres profundizar en el concepto y aplicación del propósito de marca, te dejo 5 artículos que te ayudarán:

Tu emprendimiento te estará esperando

 Sin tu tenerlo en mente, cuando trabajas en la definición del propósito lo que estás haciendo es dar vueltas en torno al modelo de negocio que mejor encaja contigo.

Estás tratando de entender o decidir a qué te deberías dedicar y te planteas diferentes escenarios. Pero te acabas dando cuenta de que lo tenías delante de tus narices desde el primer momento. El problema es que no tenías las «gafas» adecuadas para verlo.

¿Te parece un poco raro y/o demasiado filosófico verdad? Pues es tan cierto como que estás leyendo estas líneas ahora mismo. Pruébalo y me dices.

Una vez tienes el germen de la idea de negocio tendrás que madurarla, definir el modelo de negocio, buscar equipo, etc. etc. Este modelo evolucionará con el tiempo, pero siempre estará alineado con tu propósito.

Cuando ya has alineado propósito personal con el de la empresa, el siguiente paso es conectar con el mercado. Pero esto ya forma parte de la estrategia de marketing y de otro artículo.

Por último te dejo un vídeo resumen del contenido para facilitare su asimilación:

 

La imagen que acompaña al artículo (tomar decisión) es de Freepik.

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